Implantar una
estrategia de sostenibilidad en cualquier tipo de empresa se ha demostrado que
es rentable.
Esta generación
de consumidores, clientes o socios considera fundamental para establecer
cualquier relación comercial que la otra parte tenga un enfoque responsable en
su producto.
Además de la
necesidad real de cuidar un mundo en el que los recursos naturales y
energéticos son más escasos, la sustentabilidad es primordial.


La sostenibilidad tiene beneficios como:
Reducción de costos.
Incremento en la productividad y rentabilidad.
Acceso a incentivos.
Es una ventaja competitiva.
Prepara a la empresa para el futuro.
Mejora la reputación.
Mitiga riesgos y asegura la perdurabilidad.
Es innovador.
Mejora las relaciones internas y externas
Para que la sustentabilidad pueda integrarse a la estrategia de tu
negocio, te recomendamos las siguientes acciones:
Autoevalúa tus acciones
Apóyate en el área de auditoría y gestión de riesgos.
Identifica riesgos y oportunidades.
Diversifica tu consejo.
Comunica.


La
sustentabilidad es un círculo virtuoso con retornos de inversión a corto y
mediano plazo, ahorros significativos e incremento en la productividad. En
pocas palabras, el tema de la sustentabilidad no se trata de tener “un buen
sentimiento” por el planeta: se trata de resolver nuestra propia supervivencia.